La higiene es clave para la salud, pero cada vez más familias buscan opciones que además de cuidar el cuerpo, respeten el medioambiente. La higiene bio se basa en el uso de productos naturales, libres de químicos agresivos, respetuoso con la piel y el entorno. Aquí te contamos los principios básicos para incorporar esta filosofía en casa.

 

Los productos bio son una buena medida para tu rutina de limpieza corporal.

  • Con ingredientes naturales (como aceites esenciales, plantas, arcillas…)
  • Libres de parabenos sulfatos, colorantes artificiales y fragancias sintéticas.
  • No testados con animales y con envases sostenibles o reciclables.

Beneficios de la higiene bio

  • Menor riesgo de alergias e irritaciones
  • Cuidado de la flora cutánea natural (microbiota de la piel)
  • Disminución del impacto ambiental.

 

Rutinas básicas para cada miembro de la familia

  1. Bebés y niños pequeños
  • Uso de jabones neutros o a base de caléndula o manzanilla.
  • Evitar productos con perfume
  • Lavar el cabello con champús suaves sin sulfatos.
  • Para el cambio de pañal usa toallitas de tela con agua o soluciones caceras como agua de hamamelis.

 

  1. Niños en edad escolar
  • Enseñar a lavar las manos con jabón natural.
  • Introducir el cepillado dental con pastas sin flúor sintético ni microplásticos.

 

  1. Adultos
  • Champús y jabones sólidos para evitar envases plásticos.
  • Desodorantes bio con bicarbonato, aceites y ceras vegetales.
  • Aceites vegetales (como el de coco o jojoba) como hidratantes naturales.
  • Uso de copas menstruales o compresas de tela reutilizables.

Consejos para empezar:

Lee siempre las etiquetas: busca ingredientes reconocibles y certificaciones.

No cambies todo de golpe: empieza con un producto (por ejemplo, el jabón de manos).

Apuesta por lo local y artesanal cuando sea posible.

 

Adoptar una higiene bio es una forma consciente de cuidar la salud familiar y del planeta. Es un cambio sencillo, progresivo y con grandes beneficios a largo plazo.