Molsa
El «banana bread» es un clásico de los Estados Unidos. Normalmente se hace con huevo, mantequilla, harina de trigo y azúcar blanco. En Molsa lo hemos versionado y hemos creado una versión muy nutritiva y apta para personas con intolerancias. Nuestro banana bread no tiene gluten, ni lactosa, ni huevos y es bajo en fructosa. En lugar de azúcar refinado, hemos utilizado azúcar de maíz sin fructosa de Frusano.
Utilizar azúcar de maíz en la cocina es muy fácil porque tiene una equivalencia de 1: 1 en comparación con el azúcar normal. Es decir, una porción de azúcar blanco equivale a una porción de azúcar de maíz. A pesar de esto, el azúcar de maíz es menos dulce que el azúcar de caña, por tanto, los postres hechos con azúcar de maíz tienden a ser ligeramente menos dulces que sus equivalentes convencionales.
Ingredientes ecológicos (6-8 persones):
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- 1/2 taza de azúcar de maíz sin fructosa BIO de Frusano
- 4 cucharadas de aceite de coco BIO
- 4 cucharadas de leche de avena sin gluten BIO
- 1 cucharada de vinagre de manzana BIO
- 3/4 tazas de copos de avena finos sin gluten BIO
- 1 y 1/3 tazas de harina de avena, harina de arroz o harina de trigo sarraceno sin gluten BIO, dependiendo de lo que te guste más. Nosotros hemos utilizado harina de avena.
- 50 gramos de agua
- 30 gramos de nueces BIO
- 1 y 1/2 cucharadita de levadura en polvo BIO
- 1/2 cucharadita de canela BIO
- Una pizca de sal
- 2 plátanos BIO grandes o 3 pequeños y 1 plátano adicional (opcional) para decorar
Para esta receta hemos utilizado plátanos. Las personas con intolerancia a la fructosa se recomienda que dejen de comer productos ultra procesados, azúcar, miel y jarabes endulzantes como los de agave pero se recomienda que sigan comiendo fruta, pues la fruta tiene minerales y vitaminas importantes. El plátano es un buen endulzador natural lleno de potasio, magnesio y otras vitaminas. Hay frutas con mayor cantidad de fructosa que otras y personas con mayor o menor grado de intolerancia a la fructosa pueden comer más o menos cantidad. Los plátanos no muy maduros tienen muy poca fructosa cuando van madurando van ganando contenido en fructosa. Para hacer esta receta es mejor utilizar plátanos maduros para poder triturarlos bien con un tenedor. Como la receta hace unos 6-8 trozos, la cantidad de plátano en cada pedazo es poca y el nivel de fructosa bajo. Sin embargo, si se tiene un grado alto de intolerancia a la fructosa es mejor utilizar plátanos no tan maduros y ayudarse de una batidora de mano para triturarlos.
Si quieres saber más sobre la intolerancia a la fructosa lee nuestro artículo Todo lo que debes saber sobre la intolerancia a la fructosa.
Preparación
- Precalienta el horno a 180º.
- Coge un molde rectangular y engorda con aceite de coco para que se pueda desmoldar bien.
- Pon los 2 plátanos grandes (o 3 plátanos pequeños) en un cuenco y aplastalos con un tenedor hasta que queden bien pastosos. Añade el aceite de coco (líquido, ponlo en el horno unos minutos si hace falta) y el resto de ingredientes “húmedos” en el cuenco.
- Desmenuza las nueces y pon los trozos pequeños en otro cuenco. Añade los ingredientes “secos” en el cuenco y mezcla bien. Asegúrate de que la levadura quede bien mezclada y sin grumos.
- Añade los ingredientes secos en el cuenco de los ingredientes húmedos y mezcla bien.
- Pon la mezcla dentro del molde.
- Cortar un plátano en tiras y ponerlas encima (opcional).
- Pon el molde en el horno durante 30 minutos a 180º. Pasado ese tiempo reduce la temperatura a 150º durante 20 minutos. Así se seguirá cociendo por dentro pero no se quemará por fuera. Si ves que se oscurece mucho puedes tapar el molde con papel de horno.
- Saca del horno y deja enfriar a temperatura ambiente durante 30 minutos. ¡Buen provecho!Recomendamos comer un trozo de nuestro banana bread acompañado de un azulejo de chocolate negro sin fructosa de Frusano y una infusión. Buenísimo!En el frigorífico en un contenedor tapado, dura unos 4-5 días.
